Sublime Gracia

La Biblia nos enseña la importancia de vivir una vida transparente tanto en lo personal como en lo espiritual.  La transparencia implica ser honestos y sinceros en nuestras acciones, palabras y pensamientos, y vivir de acuerdo con los principios y valores que Dios nos ha dado. Ámbito personal , la Biblia nos exhorta a ser transparentes en nuestras relaciones con los demás. En Efesios 4:25 , se nos dice: " Por lo tanto, desechen la mentira y hablen la verdad cada uno con su prójimo, porque todos somos miembros de un mismo cuerpo" . Esto significa que debemos evitar la mentira y la hipocresí a , y en su lugar, ser honestos y auténticos en nuestras interacciones con los demás . Ámbito espiritual , la transparencia implica ser sinceros y genuinos en nuestra relación con Dios . Jesús nos enseñó en Juan 4:24 que Dios busca adoradores que lo adoren en espíritu y en verdad . Esto significa que debemos acercarnos a Dios con un corazón sincero y transparente , reconociendo nuestras d

" Amar incluso al que nos hace daño" Es muy obvio que la Biblia nos enseñe sobre el amor y el perdón, incluso hacia aquellos que nos hacen tanto daño. En Mateo 5:44-45 Jesús nos dice: " Pero yo les digo: Amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen, para que sean hijos de su Padre que está en el cielo. Él hace que salga el sol sobre malos y buenos, y que llueva sobre justos e injustos. "  El perdón y el amor hacia nuestros enemigos es un mandato de Dios, ya que Él nos perdona a nosotros a pesar de nuestros pecados. En Efesios 4:32 se nos exhorta a ser bondadosos y compasivos unos con otros, perdonándonos mutuamente, así como Dios nos perdonó en Cristo.  Es importante ,  muy importante   mantener nuestro corazón limpio de rencor y amargura , para que el Espíritu Santo pueda obrar en nosotros y llenarnos del amor de Cristo. En Romanos 12:19-21 se nos anima a no tomar venganza, sino dejar lugar a la ira de Dios, y a vencer el mal con el bien. Así que,

Al principio los hombres tienen ideas muy bajas del pecado .  Es algo insignificante , un simple error , un fallo al juzgar, un pequeño extravío, pero cuando el Espíritu Santo empieza a tratar con ellos, el pecado llega a ser una carga intolerable, algo aterrador, lleno de horror y consternación. Mientras más los hombres conocen del mal del pecado, más atónitos se quedan al pensar que alguna vez hayan encontrado algún placer en este o que puedan haberlo justificado de alguna manera.  Ahora bien, es bueno que los hombres comiencen a ver la verdad acerca de sí mismos, porque incluso si esa verdad los hace pedazos, es bueno que se liberen del domino de la falsedad.   El pecado es grande, y por esa razón el pecador piensa que no puede ser perdonado, como si midiera al Señor por su pecado e imaginara que su pecado es mayor que la misericordia de Dios.   De ahí que nuestra dificultad con los hombres que están realmente despiertos sea elevar sus pensamientos acerca de la misericordia de