Quien es el responsable?
Pero, si agarras el frasco y lo comienzas a sacudir violentamente y lo dejas sobre la mesa, las hormigas van a comenzar a matarse entre ellas.
Las hormigas rojas aseguran que las hormigas negras son sus peor enemigas, de la misma manera las hormigas negras creen que sus archivos rivales son las hormigas rojas, cuando el verdadero enemigo es la persona que sacude el frasco o la lata.
Está reflexión nos hace pensar que de la misma forma el mundo entero se divide y crean peleas que hasta llega a desencadenar en guerra. Acontecer que la sociedad está haciendo que el hombre vaya contra la mujer, la izquierda contra la derecha, ricos contra pobres, jóvenes contra los viejos, negros contra blancos, la fe contra la ciencia.
Cosas que debemos tener en cuenta a la hora de culpar directamente a alguien antes de profundizar y ver qué es lo que realmente está sucediendo antes de señalar y aventar que es uno u el otro.
Siempre, más bien es una vieja costumbre de culpar al diablo de todo, (no lo defiendo para nada) Pero, normalmente escuchamos decir, Uff, ese fue el diablo el que metió la cola y ahora existe éste problema entre nosotros. Cuando la realidad es que muchas veces es Dios que está haciendo algo para que pares y recapacite en tu actitud y te correr del camino falso.
Una vez escuché a alguien que hiba en una carreta, y de un momento a otro la carreta se rompe y cae en un barranco, el hombre que logro subir a la cima, gritaba y culpaba al diablo cuando en realidad era Dios que le estaba salvando de algo mucho peor más adelante.
Por eso es importante que antes de culpar o señalar, conviene que medites y reflexiones para luego no tener que agachar la cabeza y pasar vergüenza ante los demás.
Recuerda que nuestras palabras no las lleva el viento y tampoco podemos borrar con el codo lo que escribimos con la mano.
Somos seres inteligentes, pensantes y lleno de virtudes, por lo cual hoy aprendimos que no es bueno culpar a nadie por el simple hecho que está a nuestro lado y son distintos con pensamiento diferentes.
Por eso, Antes de comenzar a discutir entre nosotros mismos, debemos preguntar: "Quien es el que sacude el frasco?"
"Quién será aquel que diga que sucedió algo que el Señor no mandó?"
El que lee, entienda.
Comentarios
Publicar un comentario