Con qué fin tanto esfuerzo
Es muy interesante desglosar Eclesiastés 2:18-23, se nota que el autor está reflexionando sobre la vanidad y la frustración de acumular riquezas y logros innecesarios en la vida.
El versículo 19 dice: "Y ¿quién sabe si será sabio o necio el que se enseñoreará de todo mi trabajo en que yo me afané, y en que ocupé debajo del sol mi sabiduría? También esto es vanidad." El autor se pregunta si la persona que heredará todo su trabajo será sabia o necia. Reconoce que, al final, todo su esfuerzo y sabiduría pueden ser en vano si la persona que lo hereda no sabe cómo aprovecharlo adecuadamente.
Aquí el versículo 20 dice: "Por tanto, di vuelta a desesperarme acerca de todo el trabajo en que me afané debajo del sol." El autor llega a un punto de desesperación y frustración con respecto a todo su trabajo y esfuerzo en la vida.
Dice el versículo 21: "Porque hay hombre cuyo trabajo es con sabiduría, y con ciencia, y con destreza; sin embargo, para el hombre que no ha trabajado en ello, le tocará su parte. También esto es vanidad y gran mal." Salomón reconoce que hay personas que trabajan con sabiduría, conocimiento y habilidad, pero al final, incluso aquellos que no han trabajado pueden beneficiarse de su trabajo. Esto también se considera vanidad y una gran injusticia.
Aquí el versículo 22 dice: "Porque ¿qué tiene el hombre de todo su trabajo, y de la solicitud de su corazón, en que él se afana debajo del sol?" El autor se pregunta una vez más, ¿Cuál es el verdadero valor y significado de todo el trabajo y esfuerzo que el hombre realiza en la vida?
Reflexión del último versículo 23 que dice asi: "Porque todos sus días son dolores, y sus trabajos molestias; aun de noche su corazón no reposa. Esto también es vanidad." El Rey concluye que la vida está llena de dolor, trabajo y preocupaciones, y que incluso durante la noche, el corazón del hombre no encuentra descanso. Todo esto también se considera vanidad.
En resumen, el autor de Eclesiastés está reflexionando sobre la futilidad y la frustración de acumular riquezas y logros en la vida, reconociendo que al final, todo es vanidad y que el verdadero valor y significado de la vida no se encuentra en estas cosas materiales.
Jesús que es más sabio que Salomón dijo una verdad irrefutable. Se encuentra en el Evangelio de Mateo 6:19-21 dice asi: "¹⁹ No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; ²⁰ sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. ²¹ Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón."
Esta declaración de Jesús es parte de su enseñanza sobre la importancia de poner nuestra confianza en Dios y no en las riquezas materiales. Jesús nos anima a buscar tesoros eternos y no enfocarnos únicamente en las posesiones terrenales, ya que estas son temporales y pueden ser destruidas o perdidas. Es más, cuando morimos nada llevamos.
Para concluir. Cómo padres sabemos cuan responsables o no, son nuestros hijos, ¿Será que Salomón no crio bien a sus hijos? ¿Porqué esa duda? Notamos esa duda justamente en el versículo 19. ¿Se afanó demasiado en hacer ésto o aquello? ¿Será que Salomón no hizo todo para la Gloria de Dios, más bien solo para restregar al mundo que él era más sabio que los demás y mostrar lo que alcanzó con su grandiosa sabiduría? ¿Acaso Salomón se olvidó que el que le dió ésa sabiduría fué Dios? ¿Será posible que en su vida íntima se jactara de todo lo que "él" hizo y ganó? ¿Sus hijos vieron esa falla en su padre, vieron que no daba la Gloria a quien corresponde? ¿Puede ser que a Salomón le quepa el texto de 1 Corintios 10:23?
Es como dijo Jesús, Lucas 6:45c
"... porque, de la abundancia del corazón habla la boca."
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