Cómo sé, qué enterré mí talento?

•  La parábola de los talentos, que se encuentra en Mateo 25:14-30, nos enseña sobre la responsabilidad de utilizar los dones y talentos que Dios nos ha dado. En la parábola, un hombre entrega diferentes cantidades de talentos a sus siervos y luego regresa para ver cómo los han administrado.

Si hoy te estás preguntando: ¿Yo enterré el talento que Dios me dio? ¿Cómo estar segura/o que lo hice? Aquí hay algunas señales que podrían indicar que no estás utilizando tus dones de la manera que Dios desea:

1. Falta de acción: Si sientes que no estás poniendo en práctica tus talentos y habilidades para servir a Dios y a los demás, es posible que estés enterrando tu talento.

2. Miedo o inseguridad: Si evitas usar tus dones por miedo al fracaso, la crítica o la comparación con otros, es probable que estés enterrando tu talento en lugar de desarrollarlo.

3. Comodidad y conformismo: Si te conformas con una vida cómoda y no buscas oportunidades para crecer y servir con tus dones, es posible que estés enterrando tu talento.

4. Falta de frutos: Si no ves frutos o resultados positivos en tu vida o en la vida de los demás a través de tus dones, es importante reflexionar sobre cómo estás utilizando tus talentos.

Si identificas alguna de estas señales en tu vida, te animo a reflexionar, orar y buscar la guía de Dios para descubrir cómo puedes comenzar a utilizar tus dones de manera efectiva y fiel a su propósito. 

Recuerda que Dios nos ha dado talentos para Glorificarlo a Él y para bendecir a otros, así que es importante NO enterrarlos, sino ponerlos al servicio de su Reino para que otros sean bendecidos por medio del talento que Dios da.